DISCURSO DEL VICEPRESIDENTE EN EL INSTITUTO NACIONAL MEJÍA
INTERVENCIÓN DEL SEÑOR LIC. LENIN MORENO, VICEPRESIDENTE CONSTITUCIONAL DE LA REPÚBLICA, EN EL INSTITUTO NACIONAL MEJÍA
Miércoles, 21 de marzo de 2007
Señoras, señores:
Es para mí un inmenso placer volver en mi calidad de Vicepresidente de la República del Ecuador a las aulas donde comencé a crecer como persona y como ciudadano ecuatoriano.
Sin duda el Colegio Mejía se ha destacado por ser una institución de tradición, una institución representativa de la cultura ecuatoriana. Por estas aulas han pasado importantes personajes del ámbito cultural, económico, político, científico.
Es para mi un honor recibir por parte de la Sociedad de Egresados del Instituto Nacional Mejía esta Condecoración Al Mérito, sobre todo considerando que en estas aulas quedó parte de la época más hermosa de mi juventud y sobre todo época en la que quedó marcada mi alta conciencia hacia lo social y la escala de valores donde prima mi transparencia y servicio a la Patria.
Esta Condecoración que acoge la gloria del Instituto Nacional Mejía resulta un estimulo mas, hacia el firme cumplimiento de mis objetivos y metas propuestas en beneficio de los más pobres y de la revolución por una Patria altiva y soberana.
Precisamente es política de nuestro gobierno sustentar el desarrollo del país a través del mejoramiento de los niveles de la calidad de la educación y justamente el valuarte del sistema ha sido el Instituto Nacional Mejía, cuna de grandes personajes de la nación que se han engrandecido nuestra historia.
Precisamente en estos días como ejecución de la política propuesta me he reunido con el señor Bill Gates y debo anunciarles como premisa el apoyo que su Fundación dará a nuestro país con la facilitación de tecnologías de la información y de la comunicación hacia la educación sin discriminación ni de etnia ni de género y peor aun hacia los discapacitados.
Felicito a todas las autoridades, a sus maestros y sus alumnos y les acompaño en la celebración de las fiestas en honor de San José.
Muchas gracias